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Ernesto Gamarra

Ernesto Gamarra / Nombres de tránsfugas (3 de 6) 

Los nombres de los tránsfugas

 

Farah, quien fuera presidente de la Sociedad Nacional de Industrias en el periodo 1995-1998, fue librado del cargo de recibir dinero de Montesinos por el propio asesor y sus colaboradores. Sin embargo, su ex esposa, doña Eveline Bote, envió a los medios de comunicación una carta en donde señalaba que sí había recibido quinientos mil dólares para pasarse a las filas del gobierno y que ese dinero le fue depositado en un banco de los Estados Unidos. Farah, nunca quiso responder a ese cargo y no sabemos si alguien se encargó se seguir la pista en los Estados Unidos o, por lo menos, si se citó a declarar a la señora Bote. Montesinos estaba preocupado por el origen del dinero?

 

Es probable ya que hubiera tenido que reconocer e identificar las cuentas que tenía en el extranjero y que alguna vez una cuñada del dirigente aprista Jorge del Castillo Gálvez logró obtener del banco en donde esta trabajaba.

 

Hoy Farah, sigue vinculado a la industria y no hace mucho ha tenido activa participación en su calidad de presidente de la asociación peruana de la Industria Plástica, combatiendo lo que ha llamado el lobby de la industria del papel que pretende, según él, desplazar del mercado, el uso de las bolsas plásticas sustituyéndolas por bolsas de papel, como se está haciendo en casi todo el mundo.

 

Luego vino al reducto de Montesinos, ANTONIO PALOMO OREFICE, elegido parlamentario por Loreto, por el partido Perú Posible de Alejandro Toledo. Según Montesinos, dada la personalidad tan extrovertida de Palomo, de frente fueron al grano y pactaron el pago de veinte mil dólares mensuales, entregándole en ese mismo momento el primer pago pactado. Al peor cazador, y Montesinos no era precisamente el peor, no se le podía escapar este palomo que por su propia versión imaginamos la escena en donde apenas lo vio sabía que no se negaría a sus requiebros dinerarios.

 

Ante el juez Peña, Montesinos también se refirió a Palomo Orefice, al que no había hecho mención el diario “El Comercio” en su crónica del 21 de julio. Fue llevado al SIN por el coronel de la Policía Nacional del Perú Manuel Ayvar Marca, de quien Palomo era amigo. Coincide totalmente la versión dada tanto en el juzgado como en la comisión del Congreso sobre el monto, la persona que los presenta y la coquetería con que se muestra Palomo para aceptar lo que le ofrece su cazador.

 

Palomo, elegido por Perú Posible, había sido antes, regidor municipal en la provincia de Maynas de 1995 a 1998; y es precisamente Iván Vásquez Valera, al Alcalde de esa provincia a quien inicialmente responsabilizó de ser el causante de su conversión al fujimorismo.

 

En la comisión que lo investigaba declaró que Vásquez lo citó a su despacho y lo convenció de que era conveniente que dejará de ser miembro de la bancada de Perú Posible y que pase a engrosar las filas del partido de gobierno, lo cual sería apoyado por el coronel de la policía nacional Manuel Ayvar de quien Vásquez era muy amigo. Estaversión, fue desmentida por Vásquez y por los propios hechos, aunque no se descarta eso sí, que el contacto de Palomo con el mencionado coronel muy cercano a Montesinos, haya ocurrido en las oficinas de la municipalidad de Maynas.

 

Sobre Antonio Palomo también cayó la acusación de haber intervenido a favor de que fugara del país José Lizier tramitándole un salvoconducto, fuga que ocurrió luego de conocerse que Lizier había prestado apoyo a Vladimiro Montesinos para que fugara a Panamá en el velero de su propiedad “Karisma”. Se le procesó judicialmente a Antonio Palomo por los delitos Contra la Administración de Justicia,

 

Contra la Administración Pública, Encubrimiento, concusión, patrimonio ilegal etc., etc. El fiscal pidió trece años de prisión para él, pero fue condenado a ocho años que los cumplió casi en su totalidad.

 

Pero las desgracias de Palomo no terminan ahí. El año 2018, para su suerte, sale sorteado en la revisión de equipajes cuando regresaba de un viaje de Colombia. ¡Y qué creen? Al revisarle su maleta los agentes de aduana le encuentran productos que debían pagar impuestos y que él no había declarado. Se los decomisan y pierde aproximadamente mil quinientos dólares.

 

No hay duda que Antonio Palomo ha sido quien sufrió el castigo más severo de los congresistas desertores. Los jueces se ensañaron con él, sabiendo que otros, habían obtenido mayores beneficios. Otro que como Farah tampoco habría recibido dinero según la versión de Montesinos, fue EDILBERTO CANALES PILLACA, también elegido por el partido Perú Posible y que aceptó incorporarse a las filas de Perú 2000. Según Montesinos, en su declaración ante el Congreso, Canales se habría incorporado a Perú 2000 a cambio de que le arreglaran unos problemas judiciales que tenía en Ica, de donde era natural. Al parecer, se le “ayudó” a resolver dichos procesos en su contra, a través del doctor Pedro Huertas Caballero, asesor del asesor. Tarea muy sencilla para Montesinos que, como sabemos, tenía el control absoluto del Poder Judicial.

 

A Canales Pillaca lo llevó una noche a las instalaciones del Servicio Nacional de Inteligencia, su paisano iqueño y ya reclutado congresista, Elías Avalos, quien ya no solo integraba la bancada fujimorista sino que, además, se cachuleaba como jalador.

 

A Canales no le nació de pronto el amor por Fujimori, ni lo motivó la ayuda de Montesinos. Ese amor ya lo acompañaba desde antes de ser parlamentario de Perú Posible. Y lo prueba, el registro de visitas a Alberto Fujimori en su prisión de la DINOES a donde lo fuera a visitar en setiembre del año 2011, según dio cuenta el diario La República, acompañado de su socio y hermano, Ángel Canales Pillaca. Así, pues, uno de esos días en que, como era costumbre visitaban al ex presidente en su prisión también se halló al que fuera alcalde de Miraflores German Kruger como lo hizo conocer ese diario.


 

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