top of page
Foto del escritorAnálisis Efectivo

Jorge Arévalo y Victor Vásquez / Organizaciones de Usuarios de aguas (2 de 5)

Del uso eficiente y el Poncio Pilatos del agua

Alrededor del uso del agua para la agricultura siguen las mentiras, porque así culpan a otros de su propia irresponsabilidad; existe una llamada Autoridad que por mandato tiene que ver con la Gestión de los Recursos Hídricos y en ello el agua, pero que lamentablemente la ANA perdida en su burocracia no encontró mejor formar de endilgar esta responsabilidad a las OUAs, graficando, es el Pilatos del agua. Los productores son usuarios y sus organizaciones son mero administradoras que es totalmente diferente a ser gestoras.


La ley indica, que las Juntas y las Comisiones son responsables del “Uso racional y eficiente del recurso agua (Art 4 – Inc. b)”. Hablamos de un país, y de una actividad agrícola que se desarrolla en millones de pequeñas parcelas, cada una independiente, de la otra. Cada quien toma sus propias decisiones. Para que nos entiendan los de la ciudad, imagínense millones de pequeñas servilletas, apretujadas en una mesa grande, esa es la foto del gran campo agrícola del Perú.


Bien el tipo de riego es tradicional, o por inundación y en las pequeñas chacras -como le llaman los campesinos- se fue sembrando por temporadas, lo que resultó finalmente que las plantas se ubiquen en un completo desorden. No se puede exigir uso racional y eficiencia, cuando no hay un patrón de módulo de riego. Las Juntas y las Comisiones no tienen registro de cómo se transforman las chacras. El delegado o repartidor del agua, le pregunta al agricultor “cuántas horas quieres de turno de agua”. Esta pregunta no se plantearía, si supiéramos que cultivo puebla la chacra, que tipo de suelo tiene el campesino, cómo es su sistema de riego y si el delegado estuviera capacitado.


El agua es escaza, pero también es verdad que le damos un mal uso y en gran parte la desperdiciamos; no culpemos todo a los usuarios porque desde el Estado – MIDAGRI son incapaces de liderar un verdadero programa orientado a lograr elevar la eficiencia en el uso, solo preguntémonos si, en pleno siglo 21 nuestros agricultores conocen los módulos de riego para sus cultivos, zonas, tipologías de suelo, épocas de cultivo. Entonces concluyamos que No es posible lograr un uso racional y eficiente, sino se cuenta con conocimiento y tecnología.


Ley manta, para arropar a los Drácula del agua

La realidad nos dice que existen sistemas de riego regulado (aquellos de los reservorios/represas) y otros que no forman parte del sistema anterior; su organización no hace distingo del tipo de sistema porque funcionan los doce meses del año, como dirían tengan o no agua para repartir, pero si tienen que pagar a su burocracia y dirigentes y otros todos los meses. La mayoría de Juntas corresponden a esta última y en consecuencia son los productores quienes con la tarifa apenas cubren estos costos. Señores Congresistas ¿con esta realidad pretenden que las OUAs financien la infraestructura de riego?, cierto que no y entonces porque no legislaron para esta realidad? Ustedes prefirieron optar, por no sacrificar a estos Drácula que viven de la tarifa y del productor.


Reza el dicho que el papel aguanta todo, y la ley establece que las Juntas y las Comisiones se encargan del “Mantenimiento de la infraestructura de riego y la tarifa de agua”. (Art 4 – Inc. c). Para entender mejor lo antes referido se explica la realidad de la Junta del Alto Piura, debe ser igual o parecida a otras muchas en el país; esta Junta, al no tener riego regulado, reparte agua y cobra por la misma en un promedio de 6 meses al año. ¿De dónde se sacan fondos, para cumplir con este mandato de mantenimiento? Buena pregunta. Por la naturaleza de las Juntas y Comisiones, deben pedirle obligatoriamente al papá Estado.


Con el poco ingreso que obtienen, deben cubrir la planilla de empleados, pagar el salario a los delegados o tomeros (sectoristas) de agua, mantenimiento de local, de movilidad, viáticos a los dirigentes entre otros. Entonces ¿qué le queda, para invertir?, si la tarifa de agua es de cinco soles, con veinte céntimos la hora. Un caudal aproximado de 60 litros por segundo y decimos aproximado, porque no hay manera de medirlo; en algunos casos y en pleno siglo XXI, hacen cálculo, arrojando una botella plástica, de capacidad de tres litros y toman tiempo en su llenado y proyectan una cifra de litros por segundo. Los caviares dirían, que los delegados/tomeros son creativos. Nosotros decimos, eso es atraso.


En aquellas Juntas con riego regulado el caos y el tráfico del agua es una constante que solo engordan billeteras de mafias existentes al interior de las propias Juntas sin que la ANA diga o haga algo, claro son ventas de agua que nunca llegan a los Balances Contables de la Junta y cuando existen recursos para mejorar la infraestructura aparecen los famosos estudios y consultorías entregadas a los allegados a directivos o de funcionarios del ente fiscalizador.


Desde las Juntas poco o nada se espera que inviertan en mantener la infraestructura de riego y ello simplemente porque Drácula y draculines están enquistados en estas organizaciones al extremo que, los recaudos de las tarifas de agua sólo sirven para la burocracia, aupar la ineptitud y engordar actos de corrupción.


3 visualizaciones0 comentarios

Entradas recientes

Ver todo

Comments


bottom of page