En un sistema democrático como en el que vivimos (porque así lo hemos elegido, y renovado continuamente, mediante elecciones libres), debemos hacer el cambio sin ningún abuso del poder, sin violencia y sin represión fuera de lo que permite la ley, y con la más amplia participación ciudadana.
Participación ciudadana, que debe ser alentada y convocada, mediante campañas explicativas, democratizando la información, para hacer una democracia más participativa. La sociedad, cuando se le sabe llamar, responde. Tuve la experiencia de dirigir la elaboración del Plan Estratégico de Desarrollo de la Provincia de Cañete, con sus 16 distritos, y en la dinámica del proceso fueron sumando su participación, asociaciones, gremios, organizaciones de base, clubes, exalumnos de universidades, instituciones en general, etc. A la gente, le gusta participar, que la consideren. El hacerles participar, les da la identidad de cambio, el cambio que sólo será posible con el pequeño esfuerzo de todos, y no con el gran esfuerzo de pocos.
Urge una reforma del Estado, tiene que lograrse un Estado potente, del tamaño que sea necesario, eficiente y eficaz. Ejemplos en otras sociedades existen. La experiencia de Estonia, en digitalización, es conveniente lograr su cooperación técnica. Ver ejemplos de buen gobierno, como en Nueva Zelanda, Singapur, Corea del Sur, entre otros, debemos aprender. Así como en otros ejemplos, en los distintos quehaceres de la vida. Para ello, los gremios empresariales, pueden y deben ser los grandes líderes de acercamiento al mundo. Coordinando trabajo con el apoyo de los ministerios de RREE y MINCETUR, en una acción proactiva. Haciendo, sumando.
Hay que ejercer la firma de los tratados y acuerdos suscritos con numerosos países, en que somos beneficiarios. La integración se da por el comercio, la inversión y la tecnología. Hay que hacer planes de acción por mercado, eso involucra cooperación técnica, asistencia financiera, alianzas estratégicas, joint ventures, posibilidad de bilateral o multilateralmente, pedir colaboración a los diversos organismos internacionales, fundaciones, bancos de fomento, bancos de desarrollo, etc.
El universo de apoyo internacional es enorme, se le debe conocer y aprovechar de la inmensa organización económica internacional. Somos parte del mundo, integrémonos a él. Los gremios empresariales puedan formar en las 25 regiones, organizaciones empresariales de verdad, no sólo de nombre, haciendo todo lo posible, por crear empresarios para ofrecer al mundo todo cuanta riqueza nos ha sido bendecida.
Los gremios deben ser empresas creadoras de servicios empresariales y grandes promotores de nuestro desarrollo. Tienen unánimemente el ideal de la economía libre, del progreso, de la modernidad, tienen cuadros, tienen hombres exitosos en la vida empresarial, tienen creativos, tienen negociadores, organizadores, promotores, relaciones y recursos. Creo que llegó la hora de aprovechar todos estos valiosos recursos y lanzar los gremios empresariales hacia el interior y al exterior, a una verdadera revolución cultural empresarial. Llegó la hora de los líderes. Liderazgo habla sobre la habilidad de conseguir la cooperación de las personas para obtener los resultados esperados.
Es hora de que “todas las sangres” sumen. Este es nuestro país. Este es el futuro de los nuestros.