Pienso que el MIDAGRI puede tener en la UNALM un colaborador de ejecución profesional, que lo ayude a optimizar la ejecución de su presupuesto. Igualmente utilizar como soporte ejecutivo al gasto público a las demás universidades públicas en el país, que tengan profesionales del agro. Por su lado, la UNALM y demás universidades que califiquen, se verán obligadas a una gran movilización, para el uso de sus enormes recursos, que deben estar al servicio de la sociedad y, sobre todo, lo más importante movilizará a nuestra gran juventud universitaria, a poner el hombro en este anhelo de desarrollar nuestra agricultura, que aporta al país un 7,5% del producto bruto interno y absorbe al 37,8% de la población económicamente activa. Una productividad muy baja, con muchas brechas socioeconómicas y muchas brechas territoriales, con todo el potencial que tenemos por nuestra rica biodiversidad.
Hay que aprovechar los convenios que existen entre las universidades, y poner el conocimiento en los diversos fundos que el Estado ha concedido a diversas universidades, en diversos territorios del país, con distintos climas y ecosistemas, para que, desde cada uno de esa cantidad de fundos, se optimice su manejo y gestión empresarial con responsabilidad social y conciencia ambiental. Es una gran oportunidad de hacer alianzas empresa-universidad, alianzas público privadas, movilizar a la juventud universitaria en la que estamos invirtiendo para hacer un Perú mejor. Que gran oportunidad de entrenar, la mejor manera de aprender.
Estos fundos que el Estado les ha concedido, están debajo de su potencial, debajo de lo que podrían y deberían ser. No se ha sabido y definido, por tanto, qué hacer con los fundos, y con el pretexto de que no hay recursos, que ahí vayan sobreviviendo, y el Estado no utilizando óptimamente sus propios activos. Por ello, visión y misión, hay que desarrollar, primeramente. Y cambiar el espíritu de las autoridades universitarias, por una visión de mayor rentabilidad social y económica.
“La forma de obtener éxito es primero tener un objetivo claro, definido y práctico. Segundo, obtener los medios necesarios para tales fines (conocimientos, dinero, materiales, métodos). Finalmente ajustar estos medios a nuestro fin” Aristóteles.
Hay que desarrollar la ecuación de sumatoria de ingresos posibles, en los fundos otorgados por el Estado con el propósito de que practiquen y aprendan los alumnos, como enseñen a los productores agrarios del territorio circundante. Hay que ser imaginativos y crear diversas fuentes de ingreso, para su funcionamiento, mantenimiento y mejora. Los fundos, se están desperdiciando, por estadísticas se ve que no generan un dólar de exportaciones, y sus ventas al mercado nacional son muy pequeñas, y su actividad principal de proyección a la sociedad es casi inexistente.
Hay que emprender hacer todo lo que se puede y se debe hacer en cada uno de ellos, para cumplir con el objetivo de que se conviertan faros del conocimiento en el desarrollo agropecuario, para la población del territorio en que se encuentren. Los fundos, deben estar al máximo de sus capacidades, generando ingresos y conocimientos. La universidad debe también participar en la gestión del territorio, con el gran y decidido aporte de la juventud universitaria. Todo ello debe irradiar de estos faros del desarrollo agrícola.
Esos entre otros deben ser sus objetivos: Visitas: Académicas/profesionales. Prácticas: Profesionales/pre profesionales. Cursos: Aulas, alojamiento/ Programa Anual/ Convocatorias. Alojamiento y servicios relacionados, para turismo rural. Investigaciones: Convocatoria, concursos, fondos (Concytec), y otros. Servicios: Certificaciones, análisis, inspecciones, ensayos. Laboratorios. Producción de semillas de calidad para la agroindustria/Centro de acopio rural y clasificación/ Mejoramiento de pisos forrajeros y conservación de forraje para incrementar la productividad de la leche/Producción y equipamiento para post cosecha/Planta de selección, clasificación y envasado para la exportación.
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