Superficie Agrícola Suficiente Para Salir de la Pobreza
El Mapa Agropecuario elaborado por el MIDAGRI, da cuenta que existen 11,65 millones de hectáreas agrícolas las mismas que están distribuidas asimétricamente: la sierra tiene el 50 %, mientras que la selva y costa en similar proporcionalidad, 25 %. Regionalmente la costa norte tiene el 75,9 % del total regional seguido de la costa central; en la sierra, la distribución de la superficie agrícola es casi uniforme variando entre 30 - 36 %.
En términos agrícolas, el Perú es un país que subutiliza sus recursos, así se tiene que el 27,3 % del total de superficie agrícola es cultivada anualmente; en la costa el 39,4 %, sierra el 26,6 % y selva el 18,4 %, esto nos refiere la gran potencialidad existente para la actividad productiva agropecuarias. En consecuencia, habrían alrededor de 8,5 millones de hectáreas pasibles de integrarlas a la producción agropecuaria; en la costa habrían alrededor de 1,8 millones, en la sierra unos 4,3 millones y en la selva unos 2,3 millones.
Los cultivos transitorios distribuidos según región señalan que en la costa y sierra representan el 88,5 % del total de su superficie cultivada anualmente, en la región costa destaca la costa norte con el 28.7 % la sierra sur con el 24,3 % y sierra central el 14,9 %, estos tres espacios productivos, son gravitantes en la producción de cultivos transitorios, representando en conjunto el 68 % del total anual. Anualmente se cultivan 1,4 millones de hectáreas, la región sierra representa el 50 %, seguido de la costa con el 29 % y selva el 21 %.
En términos de superficie cultivada son alrededor de 3,4 millones de hectáreas cultivadas siendo la sierra la de mayor peso con el 49 %, seguido de la región costa con el 33 % y la selva con el 18 %; la costa norte, sierra central y sierra sur son muy importantes, representando en conjunto casi el 62 % del total de superficie cultivada anual. Siguiendo una lógica de potenciar la productividad agrícola y siendo su tecnificación un tema prioritario entonces el foco de atención serán aquellas regiones que representan la mayor cantidad de superficie cultivada; así la costa norte, sierra central y sierra sur, que equivalen al 62 % de la superficie cultivada, entonces la cantidad de profesionales para prestar servicios de asistencia técnica serian de 11,885 profesionales. El costo del servicio ascendería a un total de 141,5 millones de dólares.
El Perú es un país de pequeños productores y se comprueba al relacionar la superficie cultivada y número de productores dando una relación de 1,4 hectáreas por productor; bajo esta misma comparación, logrando incorporar el potencial existente el promedio pasaría a 5,2 hectáreas por productor. En consecuencia, la puesta en valor productivo de la totalidad de la superficie agrícola existente, significaría casi cuadruplicar la dotación de recurso tierra por cada productor.
El potencial de superficie disponible para ampliar la frontera agrícola, está estimada en 8,47 millones de hectáreas; la región sierra es la de mayor importancia por sus 4,3 millones de hectáreas, seguido de la región selva con sus 2,34 millones y la costa con 1,76 millones; esta distribución del potencial de superficie agrícola, es un indicador importante a tenerse en consideración al momento de planificar las inversiones requeridas para asegurar la disponibilidad de recursos hídricos.
Un análisis, al interior de la región costa, señala que en la costa norte existe el mayor potencial para ampliar frontera agrícola con 1,48 millones de hectáreas, dicha ampliación significaría incrementar 304 % el promedio actual de tierra agrícola por productor, o pasar de 1,8 ha a 5,4 has promedio/productor. Igualmente, en el ámbito de la región sierra el mayor potencial está en la sierra sur con 1,50 millones de hectáreas, seguido de la sierra norte con 1,42 millones y la sierra central con 1,39 millones. El mayor incremento en la dotación de superficie agrícola para el productor será en la región de selva, que pasaría de 2,8 a 15,1 ha. Tabla 1 y 2.
Habiéndose comprobado la disponibilidad de 8,47 millones de hectáreas agrícolas, que constituyen la frontera de producción en términos del recurso suelo y su factibilidad, en términos financieros, de integrarlas al circuito productivo corresponde a las autoridades de gobierno evaluar las ventajas, condiciones y modelos de intervención para su aprovechamiento; no es demás señalar que las inversiones necesarias deberían estar alineadas a los conceptos modernos de una agricultura empresarial y globalizada, garantizando así las mayores tasas de rentabilidad social y económica y, además sean sostenibles.
Obviamente esta búsqueda de rentabilidad, es para darle el mejor costo de oportunidad a los recursos públicos y no repetir las lecciones de mala recordación del pasado, en que gobernantes y autoridades priorizaban las inversiones basado en réditos políticos, sin poco importarles que, a mediano plazo, no sólo acrecentaban la pobreza, sino estaban gestando corrupción, mediante el tráfico de tierras.