Julio Schiappa Pietra / Jara reactiva la concertación chilena
- Análisis Efectivo
- hace 7 minutos
- 2 Min. de lectura
Jeanette Jara, candidata de la izquierda elegida por 1 millón 300 mil votos en una primaria, gano otra elección esta vez la interna de la Junta Nacional de la DC. Tiene una cábala con superar el 60%: conquisto el voto de la izquierda con 64% ahora el de la DC con el 63%.
Jara hace una campaña vinculada a las necesidades concretas de la gente, con un mensaje que revindica la inclusión social, la unidad de todos los chilenos en pos del progreso económico y social.
Es el rollo esperado de cualquier candidato progresista, pero Jara también es clara. Su gobierno transformará Chile. Basta un solo ejemplo: propone eliminar el secreto bancario para perseguir el narcotráfico, el crimen y la corrupción.
Tampoco le gustan las AFP y lo dice con su chilenisimo acento de barrio popular, piensa impulsar una reforma de pensiones complementario a su labor como Ministra de Trabajo de Bóric. Una gestión tan eficaz y concertadora, que convenció a la derecha en el Congreso de votar por su reforma del salario mínimo y aumento de las pensiones.
El realismo electoral ha empujado a Jara a la centro izquierda y a disparar un tiro de gracia a Maduro y Ortega. Dice que ella no comulga con ambos dictadores. Definición clave que la alinea con la corriente socialista democrática que encabeza Claudia Sheimbaum, el propio Gabriel Bóric, Lula y Petro.
Todos estos Presidentes en ejercicio estuvieron presentes en una reciente cumbre democrática realizada en Santiago, para responderle con golpes de Karate Brasilero a la política de Donald Trump. La batalla por Chile es prioritaria para Trump y la derecha internacional. Es un objetivo geopolítico, cultural y económico.
Chile, en esta perspectiva, es parte del triángulo del litio, con Argentina, Chile y Bolivia, además de ser un productor clave de cobre a nivel mundial. El país resulta el eslabón clave para apoderarse del Triángulo del Litio. Más barato que colonizar a Mexico y Canada o anexarse Groenlandia.
Jara ha demostrado gran filo político en los primeros debates de la campaña, poniendo fuera de combate a Katz, representante de la derecha Pinochetista: ya lo supera por 5 a 8 puntos en las encuestas.
Lo cierto es que estos acuerdos de alianza refuerzan la primera candidatura de una militante comunista en America Latina. Que ahora logra unir una coalición tan potente como fue la Concertación Chilena que gobernó Chile durante 20 años.
Feo defecto de la izquierda peruana mirar los lunares y viruelas entre sus pares. Mientras la derecha sabe que su prioridad es ganarles el 2026.
Comentarios