Mitos, dogmas y postulados en "industrias extractivas"
III. Notas sobre explotación.
Tomemos en caso de Quellaveco que era una mina propiedad del Estado de la “cartera” de Minero Perú y que fue comprada por Anglo American en el marco de las privatizaciones mecanismo único y cave de la actual Constitución de 1933 que ya tenido 33 reformas o modificaciones. Hoy todos saben que está introduciendo innovaciones tecnológicas desde la fase de construcción, digitalización, vehículos autónomos superpesados, normas de seguridad y controles en la gestión interna y externa.
Eso se hace con la participación de actores del Estado peruano, desde sus niveles de gobierno hasta pobladores y redes de empresas nativas o extranjeras que concurren a la operación proveyendo bienes y servicios.
Es una forma evidente de valor agregado en el proceso con empresas que quedarán para siempre y otras que se irán. Es una forma de incrementar el ingreso monetario y el ingreso real lo que se aprecia no solo en Moquegua. Así como de los ingresos fiscales, además de las contribuciones previas al acuerdo de darle pase legal y humano mediante los llamados “adelanto social” y “licencia social” que se da en muchas partes del mundo con otros nombres y que asegura su buen empleo mediante fideicomisos.
Hay, pues, varios años en la empresa que industria el recurso, que le da una primera y vital fase de valor, sin la cual solo existe un recurso no aprovechado, que la es la adecuada extracción y transporte de mineral a sus lugares de destino, que varían según la industrialización general de los países concernidos, por ejemplo, Argentina o Perú para China o Alemania. Es después de esta etapa que varía en su tiempo y costo que la empresa obtendrá ganancias. NO obtiene ganancias inmediatas.
Claro. Aquí no estoy considerando el incremento del valor real y en bolsa que crece con una buena gestión y comercialización incluida la imagen y cumplimiento de normas y “auto normas” internacionales desde derechos humanos hasta ambientales. Pero que también conlleva riesgos locales, nación ales, regionales, mundiales, de diverso tipo, desde una pandemia hasta cambios políticos abruptos que imponen otras reglas del juego al margen de la realidad mundial y sub mundial de hoy y los decenios por venir.
Algo que no se ha dicho es el potencial aprovechable de estas inversiones para hacer “escuela” peruana en industrias extractivas, así como Australia o Canadá, Rusia u otros Estados productores, comercializadores o que dan otros pasos en el uso de insumos de ese primer paso o fase de industrialización de lo que con tantos factores especializados se extrae para diversos usos por tantos años.
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