Embajador Jorge Castañeda / El Perú y la economía circular
- Embajador Jorge Castañeda
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La economía circular busca reducir el desperdicio y el consumo de recursos naturales desde su diseño, promoviendo la reutilización y el reciclaje de materiales y productos para maximizar su valor y minimizar los residuos y la contaminación. Este enfoque integral aborda de manera conjunta las crisis ambientales, económicas y sociales.
La importancia de la economía circular radica en su capacidad para transformar radicalmente el modelo actual de producción y consumo, al abordar de manera integrada las crisis ambientales, económicas y sociales. Su relevancia se manifiesta en cuatro dimensiones clave.

Ambiental: La economía circular reduce el impacto ambiental al minimizar la extracción de materias primas mediante la reutilización, la reparación y el reciclaje de productos. Además, elimina residuos desde el diseño, regenera ecosistemas, reduce las emisiones de CO₂ y evita la degradación de suelos y océanos.
Económica: Al reducir el consumo de recursos naturales y promover la reutilización y el reciclaje, la economía circular contribuye a la conservación de los recursos naturales y alivia la presión sobre el medio ambiente. Esto, a su vez, fomenta la resiliencia económica al mitigar riesgos asociados con la escasez de materias primas, generar ahorros para las empresas e impulsar la innovación en mercados emergentes
Social: La economía circular tiene una gran importancia social, ya que puede generar beneficios significativos para las comunidades y los individuos. Al promover la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental, la economía circular contribuye a mejorar la calidad de vida de las personas y a crear nuevas oportunidades de empleo en sectores como el reciclaje y la reutilización. Además, fomenta la inclusión social y promueve la educación y la conciencia sobre la importancia de la sostenibilidad y la responsabilidad ambiental.
De esta manera, la economía circular puede llevar a la creación de comunidades más resilientes y autosuficientes con beneficios significativos en la mejora de la salud pública, el fortalecimiento de la economía local y la promoción de la cohesión social.
Estratégica: La economía circular es fundamental para cumplir con los compromisos globales, como el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 12 (ODS 12) y el Acuerdo de París, al promover la sostenibilidad y la reducción de la huella de carbono.
Limitaciones para la implementación de la economía circular
A pesar de su importancia, la economía circular enfrenta varias limitaciones para su implementación efectiva. Entre los desafíos técnicos y logísticos se encuentran la dificultad para reciclar productos complejos, como electrónicos con múltiples materiales, y la infraestructura insuficiente para la recolección y clasificación de residuos.
Existen, asimismo, barreras económicas como la inversión inicial alta en rediseño de productos y cadenas de suministro, y la competencia con materiales vírgenes que pueden ser más baratos debido a subsidios. También hay desafíos regulatorios y culturales, como la falta de estándares para etiquetado circular, la dificultad para escalar modelos de negocio innovadores y la resistencia al consumo colaborativo de compartir, intercambiar o alquilar bienes y servicios en lugar de poseerlos de forma individual, que varían significativamente de un país a otro.
Se estima que, actualmente, solo el 9% de la economía global es circular. Esto pone de relieve la necesidad urgente de una mayor coordinación y regulación en este ámbito para acelerar la transición hacia una economía más circular
La Economía Circular en Perú: Avances y Desafíos
El desarrollo de la economía circular en Perú está siendo impulsado por políticas públicas y privadas. El gobierno peruano ha implementado políticas y programas para fomentar la economía circular, como la creación de hojas de ruta sectoriales para industria y agricultura. Además, se está preparando una hoja de ruta para manufactura hacia 2030, lo que demuestra el compromiso del país con la sostenibilidad.
La Guía Peruana GP 127 es un instrumento clave para estandarizar prácticas circulares en el país. Esta guía se alinea con normas internacionales ISO 59000, lo que permite a las empresas peruanas adoptar prácticas sostenibles y mejorar su competitividad en el mercado global. De esta manera, las empresas pueden reducir su impacto ambiental y mejorar su posición en el mercado.
El sector privado en Perú ha demostrado un compromiso significativo con la adopción de prácticas de economía circular. Empresas líderes como Scotiabank, Corporación Lindley y Aceros Arequipa están implementando iniciativas innovadoras para reducir su impacto ambiental y promover la sostenibilidad.
Scotiabank se ha comprometido a reducir sus emisiones de CO₂ en un 45% para el 2030, demostrando su compromiso con la lucha contra el cambio climático. Por su parte, Corporación Lindley ha implementado la iniciativa "Residuos" para recolectar y reciclar sus productos, reduciendo la cantidad de residuos que terminan en los vertederos y promoviendo la economía circular.
Aceros Arequipa es otro ejemplo destacado, ya que genera acero completamente reciclable a partir de chatarra metálica y reutiliza sus subproductos en otros procesos, minimizando la extracción de recursos naturales y reduciendo el desperdicio. Estas iniciativas no solo contribuyen a la reducción del impacto ambiental, sino que también promueven la innovación y la competitividad en el mercado. Al adoptar prácticas de economía circular, estas empresas están liderando el camino hacia un futuro más sostenible y responsable en Perú.
A pesar de estos avances, persisten desafíos significativos que deben ser abordados para lograr un desarrollo más sostenible y circular. Para superar estos desafíos, es fundamental que el gobierno y las empresas trabajen juntos para implementar políticas y prácticas efectivas que fomenten la economía circular en Perú.
Para potenciar la economía circular en el Perú, se requiere implementar varias estrategias clave. En primer lugar, es fundamental fortalecer las políticas regulatorias, acelerando la implementación de la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor y eliminando los subsidios perversos que encarecen los materiales reciclados. Esto permitirá crear un entorno favorable para la adopción de prácticas circulares y reducir significativamente el impacto ambiental.
La inversión en infraestructura es crucial para el desarrollo de la economía circular en el Perú. Esto incluye desarrollar plantas regionales de tratamiento de residuos y sistemas de logística inversa para sectores prioritarios, como la industria electrónica y textil. De esta manera, se pueden procesar de manera eficiente los residuos y recuperar materiales valiosos, reduciendo significativamente la cantidad de residuos que terminan en los vertederos.
La promoción de la educación en sostenibilidad y las alianzas estratégicas entre empresas, instituciones educativas y organizaciones gubernamentales es fundamental para el éxito de la economía circular en el Perú. Esto incluye escalar programas de capacitación en prácticas empresariales sostenibles y responsables, como Negocios Sostenibles, e integrar certificaciones circulares para generar confianza en productos reutilizados. De esta manera, se puede fomentar la demanda de productos sostenibles y promover la adopción de prácticas circulares en las empresas.
Finalmente, fomentar la innovación tecnológica es clave para el desarrollo de la economía circular en el Perú. Plataformas como el Hub Mi Empresa Circular y la Plataforma Nacional de Innovación en Economía Circular pueden ayudar a las empresas a implementar prácticas circulares y desarrollar soluciones innovadoras. Al conectar a universidades y empresas, se puede fomentar la colaboración y el desarrollo de tecnologías y productos sostenibles que apoyen la economía circular en el país.
Aunque Perú ha sentado bases sólidas para el desarrollo de la economía circular, su éxito dependerá de superar las barreras financieras y culturales que aún persisten. Sin embargo, el potencial es prometedor, ya que se estima que la economía circular podría generar un aumento significativo en el empleo verde, con un crecimiento proyectado del 2.27% para el 2030. Esto no solo contribuiría a la creación de nuevos puestos de trabajo, sino que también posicionaría al país como líder en sostenibilidad en América Latina, aprovechando su rica biodiversidad y recursos naturales para impulsar un crecimiento económico más sostenible y equitativo.
De esta manera, Perú podría convertirse en un modelo de éxito en la región, demostrando que la economía circular puede ser un motor de desarrollo económico y social. Al aprovechar las oportunidades que ofrece la economía circular, Perú puede generar un impacto positivo en su economía y sociedad, y servir de ejemplo para otros países en la región.