top of page
  • Foto del escritorAnálisis Efectivo

Victor Vasquez Y Jaime Salomón / Una asociación pendiente IV (5 de 5)

V. Importantes y necesarios, pero aislados


35. El Perú es un territorio bendecido por la diversidad y cantidad de recursos minerales, gasíferos, bosques y pasturas, pero también sus espacios agroclimáticos lo ubican como uno de los más importantes productores de oro, plata, cobre, frutas, hortalizas y próximo de litio y uranio;

36. Nuestras praderas alto andinas fueron el bastión de riqueza hasta los años 1950; y, los bosques que ocupan 68 millones de hectáreas siguen siendo un potencial económico y ambiental. Ambos espacios siguen excluidos de una verdadera política de desarrollo, como el caso forestal que sus beneficios son aprovechados por economías ilegales;

37. Coexisten dos actividades económicas gravitantes en la economía y sociedad peruana, la agricultura moderna especialmente afincada en la costa y la minería con enclaves de explotación en la sierra peruana;

38. La sierra juega un rol clave en el desarrollo de estas actividades en tanto es la naciente de todos los ríos por cuyos cauces discurren las aguas para terminar en la agricultura costeña y amazónica, cauces que por la desatención pública y falta de visión de los empresarios cada año siguen un acelerado proceso de degradación y contaminación; además de la pérdida de lagunas y puquiales andinos que se ubican en las cabeceras o nacientes de los ríos o cuencas;

39. La minería ha dejado secuelas de contaminación, y se aprecia con los relaves. El propio Estado está fallando por no hacer cumplir la ley; y, los empresarios mineros aunando el deterioro ambiental. Claros ejemplos siguen siendo los relaves en el rio Santa (Recuay), en el rio Mantaro, en el rio Rímac y el rio Moche;

40. La miopía e indiferencia del estado para reducir la contaminación por minerales en las aguas de los ríos, a mediano plazo significará que el Peru pueda perder la posición de privilegio y reconocimiento en el comercio mundial, generando una verdadera crisis social y económica para los peruanos (hoy son casi 10 mil millones de dólares exportados y casi 850 mil puestos de trabajo);

41. En este punto crucial de dependencia, agricultura – minería y por los efectos e impactos generados, consideramos que corresponde que estos actores participen directamente en las soluciones. Unos para no perder sus mercados y el otro para demostrar una verdadera y nueva cultura de responsabilidad social y ambiental en la explotación minera;

42. Por qué no visionar a los agroexportadores financiando sostenidos programas de reforestación y recuperación de las cuencas para asegurar mayores ofertas hídricas para la agricultura, agricultores y sociedad, así como al empresario minero forjando una amigable cultura de convivencia social con sus históricos vecinos alto-andinos, dotándolos de infraestructura pequeña y mediana para el almacenamiento y equitativa distribución de agua;

43. Agricultura y Minería son dos sectores estratégicos en la vida económica y social del Perú, representando el 75 % del valor de las exportaciones, generadores de empleo formal, directo e indirecto y con un extendido eslabonamiento en la economía;

44. En el último sexenio la minería ha exportado por un valor total de 183 mil millones de dólares representando el 60 % del valor exportado nacional, su participación ha variado entre el 55 al 63 % variación explicada por el comportamiento de los mercados internacionales. Además, los nuevos proyectos por un valor de 75 mil millones de dólares serian de gran impacto;

45. Por otra parte, la actividad agropecuaria a partir de la agricultura del desierto a posicionado a productos no tradicionales como los más gravitantes; con un aporte a la exportación nacional en el sexenio ultimo acumula un valor de 47 mil millones de dólares representando el 15 % de las exportaciones nacionales (Tabla 4).


46. Ambos sectores (agricultura y minería) requieren seguridad jurídica como condición para afincar nuevas inversiones; además, el Estado debe garantizar seguridad y orden junto a la estabilidad política. Ello pasa por trabajar con los verdaderos representantes de la población;

47. Se hace necesario consensuar una nueva Ley Nacional de Minería en donde se afirme el respeto y garantía a la propiedad; además, con igual urgencia, una nueva estrategia de distribución del canon asegurando que las poblaciones directas disfruten de sus beneficios;

48. Reflexionemos sobre nuestra realidad y tracemos el futuro reconociendo que ambos sectores económicos son importantes y dependientes, mereciendo miradas y acciones compartidas en el propósito de asegurar sostenibilidad social y económica a sus negocios y una práctica de compartir y disfrute social de sus beneficios; ello impactará en la desaparición de los grupos e instrumentos de presión, que atisban la conflictividad social;

49. Se requieren políticas y estrategias diferenciadas. Para la agricultura costeña o del desierto, la necesidad de nuevas inversiones en almacenamiento (represas) siempre con un sentido de equidad por tratarse de espacios de convivencia con sectores tradicionales de pequeña y mediana agricultura. En la sierra, la necesidad de incorporar las áreas de agricultura de secano a través de un programa de inversiones para el almacenamiento de agua bajo un enfoque multipredial y comunal; así fácilmente pueden ser incorporadas cientos de miles de hectáreas al proceso productivo. También urge un sostenido programa de mejoramiento y recuperación de las pasturas. Para la región de la amazonia, su desarrollo debe estar basado en la explotación sostenida de su diversidad productiva y un enfoque del aprovechamiento del bosque, sustentado en la propiedad real y capaz de generar una verdadera industria del bosque, su desarrollo exige modelos diferenciados de intervención;

50. El propio Estado debe plantear soluciones a los problemas identificados por los actores, para así dedicarse a cumplir un rol de promoción y fomento que garantice la seguridad en sentido amplio;

51. El crecimiento y desarrollo descansan en las inversiones y como tal éstas se orientan a actividades y espacios donde aseguren rentabilidad. El estado debe asegurar el crecimiento y promover la inversión para reducir la pobreza;

52. A pesar que, en los dos últimos años, el Perú sigue sumergido en una inestabilidad política y conflictividad social, generada y alentada por sus propias autoridades y por una creciente corrupción de las autoridades de los gobiernos subnacionales. Ello requiere un cambio desde el propio Estado, que se corregirá solo si la ciudadanía elije a sus autoridades en función a su conocimiento, experiencia y demostrado amor por el Perú.


A manera de conclusión y por las evidencias reseñadas, el Agro y la Minería fueron y seguirán siendo actividades de gran importancia para el país, pero urge una nueva visión con acciones conducentes a construir espacios de desarrollo inclusivo social y económico, que tienda puentes para que las personas y familias sean el centro de sus compromisos y de responsabilidad social y empresarial.



Referencias:

Los autores son, Dr. Jaime Salomón S.; Ex Vice ministro de Agricultura, Presidente de la Defensoría; MSc. Víctor Vásquez V; Consultor privado en temas Desarrollo, Director Ejecutivo de la Defensoría.


6 visualizaciones0 comentarios
bottom of page