En esta vida híper agitada e híper ansiosa dónde el organismo humano no se detiene para respirar y darse un tiempo para alimentarse adecuadamente, ante la vorágine de esta vida llena de alimentos elaborados con preservantes y congelados. Cuando hablamos de alimentos con características antioxidantes nos referimos a aquellos que frenan y retardan el envejecimiento, como los betacarotenos, el licopeno, la luteína, el selenio o las vitaminas A, C y E, ayudan a reducir el impacto de los radicales libres sobre el organismo. Esto permite prevenir diferentes enfermedades y también el envejecimiento celular.
1. Arándano. Los arándanos destacan por su contenido en antioxidantes, especialmente antocianinas (de la familia de los flavonoides). También tiene vitamina A, E y selenio, además de ácidos fenólicos y fibra. No tiene grasas y es bajo en calorías. Sus vaccinium flavonoides son antioxidantes reconocidos por sus propiedades anticancerígenas y su uso en el tratamiento de enfermedades coronarias e infecciones del tracto urinario.
2. Brócoli. El brócoli aporta al organismo vitaminas (vitamina C, B1, B2, B3 y B6, pero sobre todo una gran cantidad de provitamina A, principalmente en forma de beta-carotenos), y minerales como el calcio, el potasio, el selenio, el fósforo, el magnesio y el hierro.
3. Zanahoria. La zanahoria es rica en betacarotenos, precursores de la vitamina A que protegen las mucosas y mejoran la visión nocturna. Además, tiene poder antioxidante, ayuda a mantener la piel sana y a evitar los daños de los rayos UV del sol. Contiene luteína, que evita la degeneración macular del ojo al envejecer.
4. Los frutos rojos. Estas pequeñas frutas están cargadas de multitud de sustancias con poderes antioxidantes: antocianinas, compuestos fenólicos, flavonoides, taninos, vitaminas, se destacan entre los frutos rojos, los beneficios de la fresa, la frambuesa, el arándano, la mora y la grosella espinosa india. Brindan beneficios en enfermedades oncológicas, así como en la reducción de las concentraciones de colesterol malo o lipoproteínas de baja densidad (LDL, por sus siglas en inglés).
5. Las nueces. Los frutos secos y, en especial, las nueces son uno de los grupos de alimentos más beneficiosos por su contenido en grasas cardiosaludables y fibra. Sin embargo, otro aspecto desconocido de este gran alimento es su potencial antioxidante, después de consumir nueces nuestros niveles de antioxidantes en sangre se elevan. De hecho, dentro del grupo de los frutos secos, las nueces son aquellos que más antioxidantes contienen. Además, sus beneficios se aprovechan en mayor medida porque es un fruto seco que siempre comerse siempre crudo, sin tostar. Esto hace que las sustancias que contiene no sean eliminadas por el calor.
6. El chocolate negro. El cacao es un alimento con gran contenido de sustancias antioxidantes. Por eso su derivado, el chocolate, también las posee, especialmente el chocolate negro con grandes concentraciones de cacao. Sin embargo, hay que consumirlo con moderación ya que su acción no es igual de beneficiosa que la de las frutas y alimentos naturales. Consumir alimentos antioxidantes con la consciencia de sus beneficios te ayudará a prevenir enfermedades crónicas producto del envejecimiento y oxidación celular. Alimenta tus células con lo mejor, prepara a tu cuerpo para luchar contra los radicales libres y obtén una salud más duradera.
7. La Palta. Posee sustancias antioxidantes y micronutrientes como el ácido fólico, el hierro, el fósforo, el magnesio y el potasio. También contribuye al control de los triglicéridos y el colesterol en la sangre.
8. Pistacho. Los pistachos tienen un alto aporte de selenio y vitamina E, que previenen el envejecimiento celular y la aparición de enfermedades crónicas. Contienen vitamina B2, que protege la piel, las mucosas y la córnea. Además, son fuente de zinc, mineral necesario para la salud de las uñas, el cabello y la piel.
9. Salmón. El salmón aporta vitaminas liposolubles como la vitamina A y la D, lo que favorece la resistencia a las infecciones, regula los niveles de calcio y su fijación y ayuda al desarrollo del sistema nervioso. Aquí en Perú contamos con la trucha de río.
10. Té verde. Algunas propiedades que se atribuyen al té verde tienen que ver con su contenido en sustancias bioactivas polifenólicas (catequinas) tales como el galato epigalotocatequina (EGCG), la epicatequina y el galato de epicatequina, que tienen propiedades antioxidantes.