top of page

Hans Behr / Prevenir con los que saben 

  • Hans Behr
  • hace 36 minutos
  • 3 Min. de lectura

Un serio problema tiene nuestro país desde hace algunos años, quizás una década está por cumplirse, donde el desorden y el caos reina en todos los niveles de nuestra sociedad producto a lo mejor de una estacionaria mirada de nuestras instituciones representadas en el Estado, donde se pierden de vista los cambios que se van originando paulatinamente en el tiempo y en el espacio, y que son relevantes al momento de dirigir un proceso de cambio y además comandar un gobierno.

 

Es necesario que el liderazgo democrático entre en rigor seriamente, donde el sentido participativo permita involucrar a las diversas instancias de la sociedad en la toma de decisiones, aprendiendo a delegar autoridad y nutriéndose de la colaboración de los que saben. Las opiniones, las ideas y las miradas cercanas a un problema muchas veces tienen visos de solución tomando en consideración a los actores involucrados directamente en el mismo. Las soluciones a los problemas que se nutren de violencia y de caos, fácilmente son manejados desde la mirada cercana de la misma población.

 

Existen instituciones sociales, sobretodo en el sector rural que manejan elementos de cohesión y de comunicación que muchas veces no son consideradas por el mismo estado y que a la larga son las primeras fuentes de información para comenzar a trabajar estrategias de prevención social y así poder disminuir el número de conflictos en el país. Las rondas campesinas, las mismas comunidades de familias campesinas, se convierten en instituciones sociales que se manejan con una estructura capaz de llevar adelante sistemas de prevención y coadyuvan a encontrar soluciones.

 

Si vamos a pensar que el papel de los gobiernos es solo represor, vamos a tener siempre un chivo expiatorio que cargue la culpa del descontrol y eso es muy fácil. Es función de la policía mantener el orden, es función también prever conflictos que están en ebullición, pero si seguimos dejando de lado la participación de la misma sociedad que puede colaborar con identificar algunas cuestiones, vamos a seguir teniendo los problemas que se han ido gestando en la última década. La intención de hacerlo está, hay que reconocerlo, existen espacios que buscan este acercamiento, lo difícil es entender que para esa labor hay gente especializada que sabe muy bien trabajar en campo.

 

El comandar un país requiere de muchas estrategias, en todos los ámbitos, decir eso no es descubrir la pólvora, el tema político, el tema social y el económico son los temas más relevantes al momento de gobernar, sin embargo, es muy sano e inteligente considerar siempre la mirada del poblador llamado de a pie, la percepción, la iniciativa y también los temores que pueden marcar el inicio de un mejor enfoque preventivo. Solo así, se podrá gobernar teniendo fijos los temas a solucionar, el resto lleva a solo tapar los huecos originados por la realidad inmediata que tarda mucho en dar certeza de los verdaderos problemas sociales.

 

Cuando algo se está gestando en la sociedad, es la misma población que con sus mismas instituciones da visos de lo que ocurre, ya sucedió en Chuschi en los 80, y lo ignoraron, historia para reflexionar, sucede en todo momento, en todos los sectores, en el urbano, en el rural. Los líderes legitimados en los barrios, en los pueblos, los grupos de pobladores de una comunidad o las juntas vecinales, son los primeros en conocer su inmediata realidad y lo que se puede originar.

 

Es necesario entonces considerar y dimensionar con firmeza que la violencia social es una realidad, y es la sociedad misma la que tiene que organizarse, tiene que considerarse, para eso, el estado tendrá que darse cuenta que ahí está el tema a tratar. Un sistema de inteligencia pasa por la indagación de campo, por averiguar particularidades culturales, por evaluar necesidades considerando modos de subsistencia, estructuras laborales y dependencias familiares, existen familias mineras, familias agrícolas, existen población que subsiste con la pesca. Cada decisión, debe ser considerativa, tarda un poco más, pero será más efectivo. Lo que existe que funcione.


 

bottom of page